VILLA ROMANA ”LA SEVILLANA”

Con motivo de la construcción del Embalse de la Serena, sobre el río Zújar, y en previsión de la inundación de las zonas de interés arqueológico, se procedió entre los años 1987 y 1989 a la excavación de la Villa Romana de La Sevillana, en el término de Esparragosa de Lares (Badajoz). Esta Villa, que resultó ser del siglo IV de C., conservaba toda su parte Urbana pavimentada de mosaicos que fueron rescatados y trasladados para su posterior exhibición.

Así, en la finca denominada "La Sevillana" se detectaron unos restos arqueológicos que resultaron pertenecer a un establecimiento rural romano. Numerosos materiales eran visibles en superficie (tejas, fragmentos de cerámicas…), así como estructuras de muros que se extendían sobre una vasta zona del valle del río Zújar. En uno de estos espacios aparecía un mosaico geométrico, que estaba al descubierto por los efectos del agua y de los excavadores clandestinos.

La villa aparecía situada exactamente en la parte baja de la finca "La Sevillana", que se extendía en la vega cercana al antiguo curso del río Zújar. Antiguamente, esta zona de vega aparecía consagrada a la explotación agrícola (cereales, viñedos, frutales y legumbres), con importantes rendimientos dada la calidad de la tierra y la proximidad del río.

Esta villa, forma parte de una cadena de establecimientos rurales romanos, situados en el valle del Zújar y ocupando tierras fértilles dedicadas a las actividades agrícolas y ganaderas.

YACIMIENTOS DE DOÑA MARÍA I Y II

Ruinas de la fortaleza templaría de la Sierra de Lares. La construcción original fue de origen berberisco, alrededor del siglo VIII, tuvo el nombre de Castillo de Lares.

Su construcción es de mampostería y piedra y está blasonado con un granítico escudo. La puerta de entrada queda definida por un arco de medio punto de cantería, encima del cual se abre un ventana rematada en frontón triangular.

Un gran balcón sobre repisa de hierro recorre la mayor parte de su fachada. Otros vanos con dinteles de cantería repartidos por la fachada sin guardar simetría y un antepecho con molduras, contribuyen a romper es estatismo de la fachada.

En su interior cuenta con un gran patio de dos pisos con arcadas en dos de sus lados que apoyan en cilíndricas y fuertes columnas graníticas. Los arcos son rebajados en el piso inferior y escarzados en el superior.

Al segundo piso se accede por una amplia escalera de peldaños de granito con barandilla forjada. En su interior, nos encontramos con nueve chiqueros para encerrar los toros y vaquillas que son lidiados en las Fiestas Patronales.

Construida en el siglo XIX, está justo en el centro de la Plaza de España. El material que se utilizó para su construcción fue el granito. Está formada por un pilón circular con gradas a su alrededor.

Un vástago cilíndrico central rematado en copa, recoge el agua que sale de un pivote piramidal de cuatro caras. La copa, por orificios vierte el agua potable al pilón.

Junto a los pies de la Ermita de la Virgen de la Cueva se encuentra lo que en sus días fue estancia del santero que cuidaba el santuario, así como lugar de descanso para los peregrinos que acudían a este elevado y santo lugar. Durante largos años sus ruinas permanecieron vigilantes del emplazamiento de donde se guardaba el tesoro más preciado de Espárragosa de Lares, La Virgen de la Cueva.

Con la creación en 1991 de la Mancomunidad Cultural y Turística denominada "Lacimurga", a la que pertenecen distintos pueblos de la zona, entre ellos Esparragosa de Lares, se propone recuperar este viejo edificio para rehabilitar el patrimonio histórico que hay en la zona.

Con esta intervención se intenta devolver al edificio su aspecto primitivo y adaptarlo a una de las misiones que tuvo, como fue, la de dar refugio a los visitantes y peregrinos, de este modo salvaría a la Casa del Santero de su destrucción total. A este esfuerzo se une el Ayuntamiento de Esparragosa que participa en los costes de dicha restauración.

La bendición del lugar y entrega de las llaves del edificio se hace en Noviembre del 2000 y se abren sus puertas para las distintas actividades que se programan en el entorno de la ermita de La Virgen de la Cueva.

Fue construido por el Marqués de Someruelo en el siglo XVIII, cuyas armas colocadas en la fachada desaparecieron hace unas décadas.

Es un edificio de mampostería con vanos enmarcados en ladrillo. Hoy este edificio se encuentra en estado de abandono y ruinoso.

El templo parroquial de Esparragosa de Lares esta datado entre finales del siglo XV y principios del XVI y esta dedicado a "Santa Catalina de Alejandría".

Es de piedra con verdugones de ladrillo, típico del estilo Mudéjar extremeño, contrafuertes exteriores. Es una nave dividida en tres tramos se parados longitudinalmente por grandes arcos. El presbiterio es de bóveda de crucería con nervaduras y destaca al exterior por su mayor altura.

Tuvo cumbreros de madera que fueron cubiertos por bóvedas de ladrillo en la reforma que sufrió en 1946. La iglesia consta de dos puertas, una al sur, llamada "Puerta del Perdón", recientemente reabierta, aunque ampliada en su espacio para un mayor accesibilidad. Ha sido construida con ladrillo antiguo y piedra y se le ha dotado de un pequeño techo elaborado al estilo de todo el tejado y subcubierto de madera.

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Otra puerta esta situada al fondo de la iglesia, es de arco de medio punto y mucho más pequeña que la del Perdón. A la  izquierda de ésta se alza la Torre, construida en ladrillo con vanos de medio punto encuadrado en alfiz junto a la torre, además, consta de dos campanas.

La iglesia sufrió una gran reforma en el año 1946, para mejorarla, por el deterioro de la Guerra Civil.

En el año 1992, el Ayuntamiento arregló el atrio de la iglesia que estaba en malas condiciones para el transito, cubriéndolo de piedra y granito así como dotándolo de vallas, asientos….

En el año 1995, se arregló la techumbre de la iglesia sustituyendo la teja árabe por la portuguesa e igualmente los cumbreros de madera por machihembrados y vigas de hormigón.

En el año 2001, la iglesia sufre una nueva y profunda reforma.

En esta reforma, se sustituyó el viejo suelo por losas de granito pulido, se instaló una nueva iluminación, se pintó, así como, se descubrieron los antiguos arcos para dejarlos en su original ladrillo visto.

Se trata de una construcción de tipo rústico con contrafuertes. La portada consta de arco de medio punto entre columnas y frontón partido, en el que se aloja una ventana. Tiene una espadaña con un pequeño hueco para la campana.

Está pintada en blanco y coloreada con el amarillo ocre tan característico de las construcciones de La Serena. Esta Capilla, poco a poco, entró en un estado de abandono y llegó a ser utilizada como almacén de la Parroquia.

En la década de los 90, gracias a una terna compuesta por el Arzobispado, la Junta de Extremadura y el Ayuntamiento de Esparragosa, se procedió a su restauración y fue reabierta al culto el 8 de marzo de 1994.

En la actualidad la Iglesia del Hospital cuenta con las siguientes imágenes: "Sagrado corazón de Jesús", "Imagen del Resucitado", "Nuestra Señora del mayor Dolor" y la "Imagen Procesional de Santa Catalina de Alejandría".

En una pequeña explanada en medio del camino hacia la sierra, está la Ermita del Cristo del Consuelo.

Es un edificio cuadrangular con espadaña, portada adintelada y pilastras en sus ángulos. Frente a la puerta está el antiguo "Rollo Jurisdiccional de la Orden de Alcántara", de mampostería con gradas a su alrededor y una cruz de hierro puesta en los años cuarenta.

En su interior está instalado un hermoso retablo dorado que alberga la imagen del Cristo. (Haga clic, para ampliar la imagen)

La Ermita fue honrada con el título de Santuario a principios del Siglo XVIII por el Prior de Magacela, máxima autoridad eclesiástica de la zona, y como tal, fue catalogado y descrito por Madoz en su Diccionario Geográfico y Estadístico:

"Está sito el santuario en la cúspide de la sierra, en su vertiente meridional, a 679 metros de altitud y colgado de la más dura roca, cual nido de águila. Para la subida cuenta con 315 gradas. La entrada está cubierta de un porche tejado.

El templo se compone de dos cuerpos y una sacristía; el mayor de aquellos, de forma rectangular en dos niveles, tiene siete varas de largo y está cubierto con bóvedas de aristas; el otro, adosado a los pies del anterior, tiene cinco varas por lado, se cubre con cúpula y está cerrado por dos de sus lados con forjada reja de hierro; constituye la capilla en la que está entronizada la imagen de Nuestra Señora de la cueva, colocada en un artístico retablo de estilo barroco. La sacristía adosada al mediodía al cuerpo longitudinal mide 12 pies de altura por 12 de larga y se cubre con bóveda".

Sobre la entrada a los pies del templo, un pequeño coro con barandilla metálica. En el centro del edificio, frente al cuerpo pequeño, se abre una puerta que conduce a la "campanita" –espadaña exenta-. Tesoro de Esparragosa de Lares, es la "Virgen de la Cueva", una pequeña talla de madera de reciente fabricación ya que la antigua desapareció durante la Guerra Civil.

Hoy la Virgen de la Cueva, sigue ocupando un lugar importantísimo en la vida de este pueblo ya que es mucha la devoción, cariño y respeto que se le tiene, no sólo por los habitantes de Esparragosa, sino por los de los pueblos cercanos. Custodia la imagen una hermandad que lleva su nombre, a la que pertenece gran parte del pueblo.

Igualmente la principal fiesta del pueblo es el 15 de agosto, Solemnidad de la Asunción, dedicada a la Virgen de la Cueva. Es tal el respeto y cariño que se le tiene en el pueblo que por unanimidad el pleno del Excmo. Ayuntamiento de Esparragosa de Lares le concedió a perpetuidad el Título de "Alcaldesa Honorífica" en una entrañable ceremonia celebrada en la Plaza de España, en la que de forma simbólica el Alcalde Don Basilio Redondo Redondo, le hizo entrega de un "Bastón de Mando".

En el paraje copularme llamado "Los Pilaritos" se construyo en el año 1995 una pequeña ermita en honor a "San Isidro", patrón de los labradores.

En su interior está la imagen de "San Isidro", que se procesiona el 15 de Mayo, en una romería a la que acude gran parte del pueblo.

Galizuela tuvo Parroquia propia bajo la advocación de San Sebastián.

Dicha iglesia es una pequeña construcción de ladrillo con pórtico sobre pilares, arcos de medio punto y espadaña de tres vanos. Igualmente tuvo sacerdotes propios, como  era conocido.

IMÁGENES DE LA VIRGEN DE LARES, del interior de esta iglesia